Por Wilson Francisco Vargas Ramírez
wvargas784@unab.edu.co

El concepto de superhéroe se ha concebido como un personaje de ciencia ficción que tiene poderes únicos y sobrehumanos. Figuras como Superman, Batman o el Hombre Araña han consolidado la idea de que estos heroicos individuos ficticios solo pueden existir en películas, cómics o radionovelas. Lo cierto es que sí existe gente que se ha dedicado a resolver problemas grandes y pequeños en beneficio de los ciudadanos. Son de carne y hueso, esconden su identidad detrás de un traje, y día a día salen a las calles a defender a la población. 

El personaje de Alma Vital nació en 2017 pero fue hasta 2018 cuando apareció en las calles bumanguesas. El inquilino que está detrás de este personaje es como cualquier otro ciudadano, paga impuestos, tiene un empleo y vive en un barrio clase media de la ciudad. Ser un superhéroe es una vocación que sale del corazón, por eso todos los gastos de su personaje los costea de su bolsillo. “Fue un proceso largo. Cada uno desde sus propios recursos tiene que colaborar. Obviamente se va un dinero largo… hay que comprar la moto, los suministros del traje y preparar más cosas externas que involucran nuestra economía”, afirma. 

Como cualquier superhéroe, su nombre es anónimo. Su identidad está cubierta por un casco de motocicleta con una visera polarizada de color negro, mientras que sus mejillas están cubiertas por una pañoleta, para que lo único visible de su rostro sea su boca. En medio de ese misterio afirma que su nombre de pila es Marco Lozano, lo que reiteró con sátira explicando que el apodo de Alma Vital es: “(Marco lo sano). Ese es mi apelativo. Estos detalles hacen parte de mi identidad secreta, pero prefiero que me digan Alma Vital. Ese es el nombre de mi personaje”.

“Dios me llamó a inspirar y motivar esta generación”, afirma Alma Vital. / FOTO SUMINISTRADA ALMA VITAL

Alma Vital durante los últimos años ha hecho parte de la superpandilla de Pancracio Levadura, o más conocido en la ciudad como SuperPan. La relación que tienen esos dos personajes es estrecha. “La pandilla nace en el corazón de Dios. Empecé siendo voluntario. Colaboraba en las misiones de Superpan y de ahí nació una amistad. Él conoció lo que Alma Vital hacía, de ahí sale la invitación para ser parte del grupo y ser el superhéroe de los hospitales. Tengo el honor de ser el segundo personaje de esta bonita labor”.

La creación del nombre del superhéroe nació de una palabra que inspirara a los pacientes que están en los hospitales y, a su vez, a los familiares que los acompañan. Su intención es llevar alegría y esperanza, de ahí su nombre. Alma Vital les ofrece un mensaje de vida a los niños, jóvenes y adultos que pasan por situaciones agudas con su salud. Y es que detrás de su casco dice: “Palabra de vida”. Frase que es lema para este superhéroe. “Mi principal arma para combatir a mis villanos definitivamente es la palabra de vida. El director de este proyecto es Dios, y su palabra es la que trae un mensaje vital”.

Durante la cuarentena y el tiempo que ha llevado esta pandemia ha hecho que este personaje no haya podido volver a visitar a los pacientes del Hospital Universitario de Santander, lugar donde era común verlo día tras día. Aunque esto lo limitó, no le impidió seguir llenando de vida los corazones de los bumangueses.

El trabajo de este heroico personaje en pandemia se ha centrado en contactar y visitar las casas de los familiares de aquellos pacientes que están en las clínicas. “He tratado de ayudarles con mercado, dinero, apoyo emocional y espiritual. Es así como he combatido contra mi archienemigo, la enfermedad, y más en esta situación que hemos tenido que combatir juntos para derrotar este virus”.

Este superhéroe santandereano se levanta todos los días a las 7 a.m. a luchar contra sus villanos, no solo los de su personaje, también los que cree que son sus archienemigos de la vida real: “Incredulidad, desesperanza y la necesidad. Cuando dejas de creer que algo mejor puede pasar es ahí cuando entras en crisis. Si pierdes la esperanza en lo bueno, sentirás que la necesidad es más grande que tu esperanza”.

En las calles de la ciudad a Alma Vital se le puede identificar por la gran curiosidad que causa un hombre con traje y capa azul circulando en una moto Vespa clásica del año 1994. Los que no lo conocen lo observan con suspicacia y el que lo reconoce le pide una fotografía o le agradece por su labor social.  Y aunque él tiene a su “brazo de reina” (pareja sentimental), no le incomoda que algunas “panceras” se acerquen a felicitar su trabajo.

“Estamos dispuestos a luchar por quienes no pueden luchar por si mismos”, expresa el superhéroe bumangués. / FOTO SUMINISTRADA ALMA VITAL

El vocabulario novedoso también hace parte de Alma vital y sus coequiperos de la superpandilla. “Tratamos de ser diferentes. Le ayudamos a la comunidad, le dejamos un mensaje de Dios y la ñapa es sacarles una sonrisa. Por eso le agregamos la palabra ‘pan’ a varias palabras. Eso nos identifica”. 

La gasolina diaria de Alma Vital es la sensación de sentir el poder y ayudar a quienes lo necesitan. Él es un héroe hospitalario, y con su trabajo ya ha dejado un sello impregnado en niños en delicado estado de salud o acompañando los últimos años de los adultos mayores que luchan diariamente en los hospitales de la ciudad. “Saber que puedo cambiarle un rato amargo y convertirlo a un ratico dulce a una persona que está pasando momentos difíciles en su salud, eso para mí es la gasolina que me llena y que me impulsa a seguir haciendo lo que hago… eso me satisface”.

Este personaje asegura que este proyecto tomará más fuerza para inspirar a otras personas de diferentes ciudades de Colombia para que hagan parte de esta labor social. Actualmente se están horneando más superhéroes, como el de los niños y el medio ambiente. SuperPan, (héroe del hambre), Alma Vital, (héroe hospitalario), Supersona y Sumercé, (héroes del adulto mayor), Sport-ti, (héroe del deporte) y Renota, (heroína de la música) son los heroicos personajes de la super pandilla.

Se puede ayudar desde el anonimato. Cualquier ciudadano puede hacerlo y este superhéroe busca esas personas que no necesiten de un traje para colaborar socialmente. Lo único indispensable es que hagan algo por el prójimo y actúen de buena manera ante las necesidades de los demás. Este es uno de los legados que deja este héroe en los ciudadanos.  El mensaje que Alma Vital le deja al mundo es el de la palabra que tiene Dios. “Eso ‘vital’ que pone en nuestros corazones es lo que nos ayuda a salir adelante”.

“¡No se imaginan! Es emocionante cada vez que puedo ser Alma Vital. Cada vez que me pongo el traje siento un poder. Al salir a la calle con el traje es algo inexplicable. Saber que tengo el poder de hacer algo por alguien más me llena la vida y me hace sentir poderoso”, concluye.

Universidad Autónoma de Bucaramanga