Por Natalia Serrano Castellanos nserrano505@unab.edu.co
Las series y las películas son un elemento clave en el arte del entretenimiento, sea por sus tramas o por los actores que interpretan personajes estelares. Pero no siempre la audiencia presta atención a lo que hay detrás de la pantalla y menos detallan quiénes son los que ayudan en la construcción de estos relatos. Por ejemplo, los encargados de los efectos especiales o el maquillaje, como el caso de María Fernanda Silvestre Pico (30 años).
Nacida en Socorro (Santander), la hoy maquilladora profesional para cine, televisión, moda, teatro y efectos especiales se destaca por su labor en producciones de Netflix, Amazon, Disney y HBO. Tras obtener su título de Maestra en Artes Audiovisuales en la Universidad Autónoma de Bucaramanga (Unab), viajó a Francia y estudió en el Make Up Atelier Paris, durante 2015 y 2016.
A su regreso a la capital santandereana y con la ilusión de poner en práctica su conocimiento en las producciones regionales, se encontró con su primer obstáculo: pocas producciones que necesitaran de efectos especiales.
Al no encontrar ninguna oportunidad decidió radicarse en Bogotá, en donde tres meses después de su arribo comenzó a trabajar como maquilladora de efectos especiales en la serie de Fox Premium llamada “Sitiados 2”. Fueron cuatro meses de grabación en los que tuvieron que cambiar de localidades y viajar a Cartagena, Girardot, Carmen de Apicalá y la capital del país.

El arte del maquillaje y de transformar completamente a una persona es algo que la apasiona, sin importar las horas de preparación y los sacrificios, ya que al terminar la grabación, su obra de arte desaparece porque el actor abandona el personaje y todos, incluso ella, regresan a la realidad.
No ver a la familia en largos periodos, tener poca vida social y sobre todo, no tener tiempo para sus cosas personales, son situaciones con las que también debe lidiar. María Fernanda empieza su día a las 5 de la mañana, para estar en el set a las 6:30 y comenzar a maquillar a los primeros actores. Algunos días debe maquillar hasta 20 personas, sin contar los cambios de maquillaje que se hace cada uno durante la jornada. En otras ocasiones entran dentro de su lista de labores hasta 150 extras, motivo por el cual el trabajo se duplica.
Al menos 20 horas del día debe dedicarle a sus albores. Según cuenta, son 12 horas de trabajo, pero siempre terminan siendo, 16 o 18, y “llegas agotada a dormir. Aparte, de lo que duras en el set grabando tienes que tolerar dos horas de trancón para llegar a casa cansada y al día siguiente tienes que madrugar al set. Así es de lunes a sábado”.
Como coordinadora de maquillaje, debe encargarse de hacer cumplir el proceso creativo de la diseñadora, que no falte nada a la hora de grabar, de negociar con producción el tiempo con los actores, incluso tiene que cuadrar con los peluqueros de las personas para que cada 15 días les corten el pelo o les retoquen la pintura o tinte.
A pesar de que su contrato dice que el domingo es su día de descanso, desde hace siete meses “Mafe”, como la llaman sus amigos y personas cercanas, solo ha tenido un día libre por la cantidad de trabajo. Sin embargo, está dispuesta a entregarle toda su vida productiva al set con tal de hacer lo que ama: “Tiene que gustarte muchísimo lo que estas haciendo, porque básicamente es quedarse sin vida”, como ella relata.

Egos, talento y proyección
Todo artista debe tener las herramientas necesarias a la hora de desempeñar satisfactoriamente su trabajo; por este motivo, debe tener un amplio material y estar preparada para cualquier inconveniente. En la maleta de maquillaje hay que llevar de todo, desde copitos, gotas para los ojos y hasta un pequeño botiquín, como lo explica “Mafe”.
Por ejemplo, para grabar un comercial de 30 segundos, los maquilladores deben llegar con al menos tres maletas cargadas de implementos, y puede verse exagerado, pero es importante estar preparado a la hora de solucionar el más mínimo problema, como tapar un tatuaje o cicatrizar alguna cortada.
Otra de las dificultades que tienen los maquilladores al entrar al mundo del arte y las producciones para cine, televisión y hoy las plataformas streaming es encontrarse con el ego de los artistas que, incluso, superan u opacan su talento. “Siento que se han aprovechado mucho de mí, porque de cierto modo siempre termino yo enseñándoles, pero ese no es el problema, obviamente yo les puedo enseñar y encantada de hacerlo, pero es horrible cuando ni las gracias te dan”, según explica “Mafe”.
Por esta razón pensó en dejar su trabajo, pero el amor y la pasión que siente por lo que hace fueron más fuertes. Actualmente trabaja como maquilladora de efectos especiales en series y en empresas reconocidas como Fox Premium, Amazon, HBO, Disney+ y Netflix. “He tenido procesos en los que he trabajado dos horas o dos horas y media, dependiendo de la necesidad. Pero pueden ser cuatro horas porque no se puede dejar de lado que el actor o la actriz se debe desmaquillar”, según cuenta.
Otra de sus pasiones son los efectos especiales, un área totalmente distinta a su profesión. No se ha dedicado a esto porque requiere de mucho trabajo para microsegundos de pantalla y porque su apuesta sigue estando en el maquillaje.
María Fernanda cuenta que no tiene una serie favorita, pero “Noticia de un secuestro”, producción grabada en 2021 para Amazon y basada en el libro de Gabriel García Márquez que lleva esta mismo nombre, ha sido una de sus favoritas.
En esa serie el maquillaje aporta de forma significativa en la narrativa. “Hay momentos del día en los que se hacen muchos cambios, donde tenemos a la actriz bonita y después tenemos que cambiarla, volverla nada, todo por medio del maquillaje. Obvio esos son los cambios drásticos que le aportan mucho a la historia y es lo que más me gusta de mi trabajo”, aseguró la maquilladora profesional.
Cuenta que todo la inspira, desde una buena canción o las redes sociales que sigue para inspirarse, aprender trucos y perfeccionar técnicas, pero su mayor fuente de inspiración es ver la gente en la calle. “Ver a los que hacen fila en el banco e imaginar que puede maquillarla para que se ve mucho mejor (risas)”.
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