Con aproximadamente 135 familias y siendo uno de los barrios más antiguos del municipio de Girón, esta comunidad hace un llamado de atención al Acueducto Metropolitano de Bucaramanga (AMB) y a la alcaldía, ya que llevan más de un mes sin este servicio los días sábados y domingos.

Pese a los derechos de petición por parte de los miembros de la Junta de Acción Comunal y María del Pilar Flórez Galvis, secretaria de Seguridad, Convivencia Ciudadana y Gestión de Riesgo, no se ha tenido alguna respuesta y día a día se ven más afectados por esta situación. “Ya había ido el 20 de febrero a hablar con el superintendente de servicios públicos, Hernán Rodríguez. Le comenté el problema y fue él quien me dijo que pasara el derecho de petición al acueducto”, indicó Raquel Valderrama, presidenta de la JAC.

Debido a esta situación algunos habitantes se han visto obligados a comprar por sus medios unos tanques plásticos para almacenar el agua entre semana, y los sábados y domingos que no tienen servicio, abastecerse. “Llevamos tanto tiempo sin soluciones que me tocó resolver la situación comprando este tanque e invertir de mi bolsillo 300 mil pesos porque tengo una hija con discapacidad de trastorno bipolar y ella por la droga que toma va mucho al baño y tiene cuidados diferentes”, agregó Rosa Delia Blanco, habitante del sector.

En solo una oportunidad el AMB ha hecho presencia en el barrio afectado por esta problemática. /FOTO MARÍA CAMILA ORDÓÑEZ BARBOSA

A pesar de no contar con el servicio, los residentes también indican que el recibo les sigue llegando por el mismo valor. “Acá somos estrato 3 y para las familias conformadas de 3 a 4 personas llega aproximadamente el recibo por 55 mil pesos y para una familia de 5 a 7 más o menos 90 mil”, afirma Valderrama, presidenta de la JAC.

Unas válvulas ubicadas en la calle 27 con carrera 13 frente al parqueadero del barrio fueron visitadas el sábado 9 de marzo por un ingeniero del acueducto que asistió al lugar para hacer la respectiva revisión. “Un funcionario abrió el hidrante y de una vez salió una presión, pero ese hidrante es utilizado solo para casos de incendio y esa agua a nosotros no nos llega. A las casas de la parte de abajo después del parqueadero sí, porque a ellos el agua les llega por el malecón”, añadió Luis Alberto Molina, habitante y miembro de la JAC.

El Acueducto indica que este problema no viene directamente de la empresa, sino que se está viendo afectada desde otro punto, porque ellos en ningún momento han hecho cortes en el servicio y se indicó que investigaran la situación para poder tener una pronta solución y la tranquilidad de la comunidad.

División en el suministro de agua

Las primeras casas del barrio que fueron construidas se ven beneficiadas por el acueducto y las mismas válvulas que suplen del servicio al malecón. Unos años después la caja de vivienda militar edificó unos apartamentos y casas en la parte alta del sector, y estas se surten de las mismas válvulas del barrio vecino El Sagrado Corazón, incluso, la constructora aparte les construyó a estas últimas viviendas un tanque que recibía el fluido y permanecía como un depósito para que en el momento del corte del servicio pudieran abastecerse de este.

La parte baja del barrio se ha visto un poco menos afectada, puesto que por la diferencia del acueducto a ellos a veces durante los sábados y domingos les llega el fluido, pero con muy baja presión. “A nosotros también se nos está yendo desde hace más de un mes, pero a diferencia de las casas y apartamentos de arriba, acá uno que otro fin de semana el agua baja pero muy poquita. A las mujeres nos toca durar como una hora en el baño para solo lavarnos el cabello”, agregó Miriam Flórez, habitante del sector.

Cancelación del tanque por peligro de filtración

Según la alcaldía de Girón el tanque será acondicionado para que la comunidad vuelva a tener este depósito de agua en casos de emergencia. /FOTO MARÍA CAMILA ORDÓÑEZ BARBOSA

Este tanque llevaba 35 años funcionando correctamente en ayuda a la comunidad, pero se tomó la determinación de dejarlo sin servicio ya que se encuentra ubicado en un cerro frente a las viviendas y por motivos de filtración se consideró un peligro para los habitantes. “El tanque en sí no es que esté deteriorado o acabado. A pesar de los años nosotros mismos nos hacemos cargo de la limpieza y el cuidado que se debe tener, pero es un riesgo seguir teniéndolo en funcionamiento porque con la filtración esa loma se nos puede venir encima”, asegura Molina.

El alcantarillado es otro problema que se suma, ya que los residentes del sector deben cancelar 34 mil pesos por una función que no se realiza como debería. “Ellos vienen, pero cada como 3 a 4 meses, destapan una que otra rejilla y si están limpias pues no les hacen nada, eso sí le duele pagar a uno. Son 34 mil por fanilia ahora multiplicado por cada vivienda, eso es un negocio”, indica Molina. En conclusión María del Pilar Flórez Galvis, Secretaria de Seguridad, Convivencia Ciudadana y Gestión de Riesgo indica que en el municipio de Girón el barrio El Tejar no es el único afectado por esta situación.

Por María Camila Ordóñez B.

mordonez753@unab.edu.co

Universidad Autónoma de Bucaramanga