‘Acento Santandereano’ es un emprendimiento que ofrece sus productos a través de las redes sociales. La persona detrás de esta idea es el comunicador social Nicolás Gigino Sánchez, un sangileño de 33 años, quien es el encargado de subir a diario contenido a sus plataformas digitales. Su idea es aprovechar la era digital para que los santandereanos no olviden las frases típicas que identifican a este departamento.
“Acento Santandereano surge primero con el proyecto en redes sociales. Igualmente, es la exaltación de la tradición oral santandereana y el rescate de unas palabras que se han perdido o están en desuso”, afirma el emprendedor santandereano. ‘Ole, mano’, ‘pingo’, ‘ajúmele’, ‘sardino’, ‘qué joda tan arrecha’, ‘¿qué jue?’, ‘tetiado’, son expresiones que hacen parte del diccionario de esta región y las personas que más las utilizan son los señores mayores ya que aún conservan esta cultura.
“Utilizo las frases coloquiales de aquí porque yo soy de un pueblo y allá se habla así, en el sur de Santander el acento está más marcado y otra razón es porque la gente cuando sale del departamento trata de camuflar el hablado y no hay nada más horrible que una persona de aquí intentando hablar como en Bogotá”. La forma de alimentar la oralidad desde ‘Acento Santandereano’ es que las nuevas generaciones se sientan orgullosas de utilizar estos términos al momento de expresarse. “Un costeño nunca deja su acento, él siempre está hablando así cantadito y no le importa lo que piensen los demás, igualmente los paisas, pero aquí como es extravagante y fuerte a las personas les da pena hablarlo”.
Empezó a escribir frases y a publicarlas en el perfil de la página y tuvo acogida. “A raíz de esto vi que a las personas les gustaba porque era algo nuevo, les causaba risa y las imágenes tenían muchas interacciones, entonces se me ocurrió la idea de empezar a sacar camisetas, ahorré durante un tiempo y mandé a estampar algunas”, en diciembre de 2016 salieron las primeras prendas estampadas con ‘ole Mano’ y ‘calle la jeta’, estas se vendieron rápidamente; luego empezaron a salir diferentes accesorios como gorras, mochilas ecológicas, billeteras y llaveros cada uno con las frases características, como: ‘¡sonría no viva bejuco!’, creadas por Gigino. Siempre van acompañadas de los signos de exclamación porque es una insignia de este proyecto lo exclamativo que es el acento santandereano.
“Cada vez se nota que la gente usa más estas frases y me gusta pensar que es por el trabajo que realizo todos los días”, utilizan un medio de expresión como son los memes, usan este tipo de imágenes con frases de la región y a través de Facebook o Instagram las personas tienen diferentes reacciones algunas de sorpresa, de risa e interactúan con ellos. “Esto me llena de energía para continuar con este proyecto, pero no falta los ‘jilimiscuos’, que se creen ajenos al tema santandereano y comenta que por estas frases nos ven mal, pero es porque en la ciudad esta palabra no está tan marcada como en los pueblos”.

Las frases
La forma de crear las oraciones es usar un juego de palabras, combinar una palabra típica con situaciones del diario vivir. “Escucho una palabra como ‘arremuesco’ y me imagino una conversación entre dos mujeres, en la que una le dice a la otra ‘¡qué hace saliendo con ese arremuesco!’ y así me fluyen”. Tiene dos personajes en sus historias Tulia y Remigio, entre ellos existe diversidad de escenarios que acomoda con los modismos. Igualmente, cuando visita un pueblo escucha las charlas de los residentes para identificar qué tipo de expresiones utilizan.
Este proyecto tiene como base crear un empoderamiento de las frases propias para ampliar el léxico de las personas y también busca potenciar la diversidad gastronómica del departamento. “Creé una sección que se llama ‘Pa´que llenarme de arrecheras’, acompañada de un numeral, y lo complemento con un plato típico, como las obleas de Floridablanca o las hormigas culonas”.
Los productos no sobrepasan los 30 mil pesos, este valor es de las camisetas y las gorras oscilan entre 20 y 25 mil, igualmente las bolsas ecológicas. “Son asequibles para todo el mundo”, por eso es un regalo que ha tomado fuerza porque se lo dan a los familiares que llevan muchos años fuera de Colombia. Por eso hay fotos donde los clientes tienen algún producto de ‘Acento Santandereano’ en diferentes países.
“Más allá de crear un producto comercial que monetice, esto tiene un doble propósito yo creé este emprendimiento para tener un beneficio, pero más allá de eso es crear el orgullo por lo nuestro, que digan ‘¡eso qué hijuemadres, lo que fue, fue!”. El mecanismo de ventas es a través de los mercadillos que se realizan en la ciudad y también el Ministerio de Cultura lo ha invitado a eventos de patrimonio cultural. Además, las redes sociales son su principal medio de comercialización.
La proyección de Gigino para las ventas de souvenir es la creación de una página web, Ole Mano es el nombre que llevará y se podrá encontrar en ella un catálogo de ventas. Para la exaltación de la tradición oral es trascender a nuevos proyectos, como lo audiovisual, para que aparte de leer las palabras, también se puedan escuchar con el acento santandereano y realizar un diccionario para que tengan los modismos a la mano.
Nicolás Gigino define su emprendimiento de la siguiente forma. “Es un agradecimiento de manera muy directa a lo que nos dejaron nuestros ancestros, yo simplemente soy un intermediario con la palabra y a la gente que le tiene que llegar”.
Por Andrés Felipe Acosta R.
aacosta494@unab.edu.co