Por Jhoan Sebastián Lozada Gómez
jlozada9@unab.edu.co
La crisis económica causada por la covid-19 llevó a las empresas a recortar gastos
relacionados con la disminución de entradas de dinero. La publicidad fue de los primeros aspectos perjudicados, la pauta en radio desapareció de tajo y las obligaciones de las empresas que compran espacios se vieron en gran medida afectadas para cumplir las obligaciones.

HERNÁNDEZ
Eliecer “Cheché” Hernández, director de los dueños del balón de RCN y narrador de fútbol, describe cómo vivió la crisis: “La dificultad nace en que la empresa privada nos abandonó por completo, las empresas todas, sin excepción, cancelaron la pauta comercial, ha sido muy difícil sostener incluso el 30 % que nos cobró la empresa”.

SERGIO PRADA
Otros medios de comunicación han buscado entradas diferentes a la pauta comercial. Extratiempo, por ejemplo, ha organizado durante años eventos como el torneo de la Cancha Marte, pese a que este año no se pudo llevar a cabo por la coyuntura que el país atraviesa, Sergio Fernando Prada, comentarista deportivo y socio de Extratiempo, explica cómo ha vivido la difícil situación: “El estado actual de Extratiempo no es nada fácil, hemos tenido un año muy particular, organizamos dos eventos masivos y no se pudieron hacer a lo largo del año. El tema de la pauta ha sido complejo porque las empresas hasta ahora están reaccionando, nos hemos visto afectados en los ingresos”.
La crisis no es solo local, a nivel nacional también se extiende. Juan Manuel González Bustos, dueño de la emisora Onda 5, describe la situación de sus colegas en otras zonas del territorio nacional: “La situación económica de la radio es exactamente igual de mala que en otras partes del país. Hablo con todos los amigos de Cali, de Medellín… algunos se acogieron a la ley de quiebra. La crisis no es de la radio, es del país”.
El Espectador (133 años), El Tiempo (109 años), El Colombiano (108 años) y Vanguardia (101 años) son los diarios más antiguos del país, mientras que la radio tiene 91 años, lo que confirma que durante décadas fueron los únicos medios de comunicación que tuvieron los colombianos. Posteriormente la llegada de la televisión (1954) le dio otra alternativa al pueblo, que aun así no renunciaba a la compañía de la radio, que vivía su época dorada. Si bien el periodismo era una ocupación y no una profesión, los periodistas se dedicaban a ejercer y las empresas a vender. Todo esto cambió con el paso del tiempo, las emisoras
independientes comenzaron a cambiar los formatos, llevando a los periodistas a venderles a las empresas si querían tener un sueldo.
Venta de espacios publicitarios
Las emisoras radiales independientes han subsistido durante años gracias a la venta de espacios a concesionarios que los comercializan de forma externa, este modelo de negocios se ha visto afectado de manera grave, pues al no vender publicidad cierran los espacios y son las emisoras las que terminan trabajando a pérdida. González Bustos cuenta cómo ha vivido la emisora esta difícil crisis: “En Onda 5 hemos vivido la pandemia con el credo en la boca, haciendo muchísimos sacrificios y perdiendo plata, hasta ahora empieza a reactivarse y debería ser al contrario, es la época en la que comenzó la pandemia que más radio se ha escuchado, no hay compañía como la radio”.
Esta modalidad comercial no es nueva, se comenzó a usar en emisoras independientes, pero rápidamente las cadenas imitaron el modelo de negocio, comenzaron con porcentajes y luego la venta de espacios. González Bustos cuenta su experiencia cuando llegó a Caracol Radio: “También se utilizó mucho el porcentaje, 50-50, o la emisora se quedaba con el 60%, pero eso siempre ha existido, en las cadenas no existía, pero cuando llegué a Caracol en 1980, Álvaro Fonseca me indicó que el sueldo me lo ponía yo, trabajaba por porcentaje en
el programa Zona de candela”.
La virtualidad radial
Con la aparición de las redes sociales y la virtualización de la radio los medios de
comunicación migraron al Facebook Live como una alternativa para ampliar su público y facilitar la medición estadística de las personas que los ven, esto en pro de poder venderles a las empresas con números y audiencias, siendo esta la forma de asegurar la inversión o reducir el margen de error. Sergio Prada expone las ventajas de vender de esta forma: “Muchas empresas confían en Extratiempo, primero por su seriedad y segundo por los números, hoy en día son cuantificables, entonces con esos números que tenemos en las diferentes plataformas es más fácil venderles a las empresas”.