El deporte en Santander ha tenido altos y bajos, abarcando desde casos de corrupción hasta falta de garantías para deportistas y entrenadores. Asimismo, la desigualdad es un problema latente en este escenario. La existencia de una brecha entre el apoyo y reconocimiento dado al deporte masculino frente al femenino, se suma a la falta de gestión por parte de entidades públicas y la administración inadecuada de los recursos. Sin embargo, la constancia y disciplina no detienen a cientos de mujeres deportistas que se esfuerzan por dejar el nombre del departamento en alto.

Recientemente, las diferencias que han existido entre el apoyo brindado a los hombres con respecto a las mujeres deportistas se han hecho más notables. Wendy Daphne Cárdenas Herrera, futbolista profesional, espera que esto cambie en el futuro: “No se apoya el fútbol profesional femenino,no ofrecen patrocinios o dicen que buscan solo hombres (…) No se siente ese mismo apoyo, pero poco a poco se está tratando que en el futuro las niñas puedan obtener esos beneficios por los que hoy en día estamos luchando”. De esta manera, busca cambiar el panorama con acciones y excelentes resultados.

Esta es la berraquera que destaca a las deportistas santandereanas. Ilustración/ Andrea Isabel Remolina Remolina.

“El fútbol es disciplina, constancia y dedicación.

Es luchar por mantenerse y trabajar por subir de nivel”

Esta problemática no es exclusiva del fútbol, puesto que Ana Cristina Sanabria Sánchez, ciclista profesional, expresa que se ha visto desamparada en el deporte por ser mujer, pero debido a su disciplina e interés por superarse pudo contrarrestar estos obstáculos: “Siempre he tenido dificultades por el hecho de ser mujer. Primero, no creían que una mujer que comenzaba a practicar el ciclomontañismo, fuera capaz de bajar por un camino destapado. (…) Segundo, siempre quieren contar con la participación gratuita de las mujeres. Yo costeé muchos de los viajes para competir haciendo rifas”. Entre rifas y concursos, así ha subsistido el deporte femenino a lo largo del tiempo.

Tanto Wendy Cárdenas como Ana Cristina Sanabria son deportistas destacadas en el país, que han demostrado que las mujeres pueden obtener grandes reconocimientos deportivos. Cárdenas, por su parte, inició en el deporte a los nueve años. Jugó por tres temporadas en el Club Atlético Bucaramanga y actualmente, juega su primera temporada en el Club Independiente Santa Fe. Sanabria decidió ser ciclista a los 16 años y, hasta el momento, su palmarés está conformado por 25 galardones. Estas mujeres forman parte de un gran grupo de deportistas que están gestando cambios en la sociedad, a través de la búsqueda de mejores condiciones para el futuro de todas.

A pesar de cada obstáculo, rompiendo estereotipos y cambiando imaginarios con resultados exitosos, las deportistas santandereanas han dejado en alto a todo un departamento que, a pesar de todo, cree en ellas.

Wendy Cárdenas, una de las jugadoras de fútbol con mejores asistencias del Club Independiente Santa Fe . Ilustración/ Andrea Isabel Remolina Remolina.

“Santander me ha apoyado en las buenas y en las malas” – Ana Cristina Sanabria

No obstante, la desigualdad es solo una parte del problema. Así como los triunfos de las mujeres pasan desapercibidos, parece que con los casos de corrupción que han manchado la historia del deporte ha pasado lo mismo. El panorama y su desconocimiento, por falta de información o interés, agrava el escenario. Aunque actualmente, la imagen se ve prometedora. Desde instituciones como el InderSantander, que comenzó su nueva administración este año, se pretenden impulsar iniciativas transparentes que optimicen el desempeño de los deportistas.

Así las cosas, a primera vista el universo deportivo santandereano no se ve alentador. Pero la mala administración no puede opacar el esfuerzo de Wendy Cárdenas o Ana Cristina Sanabria o cientos de deportistas que luchan día a día por llegar a las grandes ligas. Sus triunfos sientan las bases para que jóvenes que inician su carrera no tengan que experimentar las dificultades que obstaculizan la carrera profesional de las mujeres deportistas e impiden que su talento aporte al crecimiento de la región.

Ana Cristina Sanabria, una de las ciclistas con más victorias nacionales e internacionales del país. Ilustración/ Andrea Isabel Remolina Remolina.
Universidad Autónoma de Bucaramanga