Mario Daniel Sábato es uno de los comentaristas deportivos de ESPN. Quería ser médico desde pequeño, pero fue cuando vio un partido de fútbol frente a su papá el momento en el que le nació la idea de ser periodista en ésta rama. “Cuando trabajas en lo que te gusta, parece que vivieras de vacaciones”, es la frase que motivó a Sábato.
A sus 38 años es hincha del Boca Juniors y de los Yankees de Nueva York. A pesar de ello encaminó su futuro a escribir sobre ciclismo y deportes que no fueran el fútbol, “traté de buscar una alternativa”, menciona, “por la cantidad limitada de oferta laboral tuve que buscar las otras ramas”.
Sábato indica que es fundamental para el periodismo deportivo la redacción, “a una persona que inicia en la televisión se le hace más difícil la radio y la prensa, la que escribe tiene más facilidad para hablar frente a una cámara”.
Declaró además que hay que saber de todo, “nunca sabes qué te puede deparar el futuro, son cosas que enriquecen la profesión”. La forma de narrar identifica a Sábato sobre cualquier otro comentarista deportivo.

Fue luego de que Mariana Pajón ganara la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de 2012 que adquirió su sello personal, elevar los tonos de la voz, inventar frases y apodos que emocionan a mujeres, grandes y chicos.
Es un periodista que pregunta lo que le interesa, “no preparo nada antes de una charla hoy en día por la posibilidad de tener mi propio programa”. Su táctica es el bagaje cultural, “mientras estudiaba periodismo deportivo leía un libro por semana, además hice el curso de comisario”.
En relación al ciclismo colombiano, manifiestaque “antes esperábamos la montaña, ahora con Rigoberto y Gaviria esperamos las cronos, las etapas planas”, de éste último recalcó que “si él quiere puede ser el mejor embalador de la historia, tiene muchísimo potencial para ganar lo que él quiera”.
La recomendación de Sábato para los que inician en el mundo del periodismo deportivo es la lectura, la literatura, subraya que de cada escritor se puede sacar algo y permite fluir mejor a la hora de escribir y desarrollar la profesión.

Por Carlos Wilfrido Neme Monrroy
cneme@unab.edu.co