Desde el 2002 se implementó la moneda la hormiga en la Fundación Albeiro Vargas y Ángeles Custodios (Favac). La propuesta se busca fomentar la participación de los adultos mayores en actividades productivas, con el fin de fortalecer la idea de que a pesar de que cuenten con una edad avanzada siguen siendo útiles y funcionales.
Maribel Espinel Giraldo, coordinadora de la oficina del adulto mayor en la fundación, comentó que la propuesta, además, pretende reforzar el sentido de pertenencia de las personas de la tercera edad hacia la institución.
Para ganar las monedas, las personas deben inscribirse en uno de los 7 comités de apoyo que hay en la organización y llevar a cabo una de las siguientes actividades: el cuidado de la portería, el monitoreo de la granja, la alimentación de los peces, la administración de la tienda La Hormiga, el apoyo a la enfermería o la selección del mercado y picado de alimentos. Las monedas que obtienen carecen de valor fuera de la institución y solo se pueden canjear por productos de la tienda La Hormiga, que se ubica en las mismas instalaciones.
La remuneración en hormigas de cada actividad se hace teniendo en cuenta no solo la labor que realizó el adulto mayor durante el mes, sino que se consideran también otros aspectos como el comportamiento, la colaboración con sus compañeros, la responsabilidad y la puntualidad al hacer sus tareas. El pago de las ‘hormigas’ (haciendo referencia al dinero) se hace los primeros cinco días de cada mes.
El tope que puede ganar cada persona es de 400 ‘hormigas’ y con ellas puede adquirir útiles de aseo, golosinas y productos de la canasta familiar.
“Con las monedas que recibo aquí compro arroz, café, azúcar o lo que necesite de mercado para mí, pues vivo solo desde hace 6 años”, afirma Joaquín Tarazona Ardila, cuando habla de los beneficios que le proporciona la moneda, además agrega que para las personas que no cuentan con muchos recursos “es de gran utilidad la ‘hormiga’”.
Dayanna Marcela Verjel
dverjel@unab.edu.co