Desde su inicio en 2015 en el gobierno del presidente Juan Manuel Santos Calderón, ‘Ser Pilo Paga’ ha estado en constante debate. Algunos argumentan que este les permitió a los jóvenes de estratos 1, 2 y 3 acceder a la educación superior, mientras que otros aseguran que es una estrategia para desviar los recursos de las universidades públicas a las privadas.

El programa comenzó con 11.000 créditos condonables (lo que significa que los beneficiarios serían absueltos de la deuda al graduarse) para los estudiantes con los mejores resultados al presentar por primera vez las pruebas Saber Pro. Hoy, cuenta con 482.000 beneficiarios  en 993 municipios, principalmente en Bogotá, Medellín y Barranquilla.

El problema surge en la distribución de los beneficiarios, pues solo entre el 15 % y el 17 % de las universidades cumplen con los requisitos para ser parte del programa, y estas se encuentran en las principales ciudades del país.

Este año se conoció que el 82 % de los ‘Pilo Paga’ pertenecen a universidades privadas. Esto hace que las instituciones de educación superior públicas solo reciban el 2 % de los recursos del programa.

A esto se suma que, según el Sistema Universitario Estatal (SUE), la financiación de 40 mil beneficiarios de dicho programa (10 mil por año), matriculados en universidades privadas, equivale al costo de 400 mil estudiantes en instituciones de educación superior estatales.

Aunque el presidente Iván Duque Márquez afirmó que los estudiantes que hacen parte de ‘Ser Pilo Paga’ seguirán siendo financiados, para algunos ‘pilos’ que estudian en Bucaramanga el panorama aún no es claro, ya que, aún no se conoce cuál será la transformación del programa y si eso traerá consecuencias o ventajas.

Reuniones y marchas

Reunión de estudiantes ‘Ser Pilo Paga’ de universidades privadas de Bucaramanga en el parque San Pío. En encuentro se realizó el domingo 14 de octubre, a las 4 de la tarde. / FOTO JOHAN ALEXANDER SANABRIA

En medio de la movilización nacional por la educación, se organizaron varios colectivos que salieron a marchar. El 10 de octubre, estudiantes de universidades como la Autónoma de Bucaramanga (Unab), de Santander (Udes), Santo Tomás (Usta), Pontificia Bolivariana (UPB) y la Cooperativa de Colombia (UCC), realizaron un plantón en el parque ‘Guillermo Sorzano González’ o San Pío, frente al Instituto Colombiano de Crédito Educativo y Estudios Técnicos en el Exterior (Icetex), para pedir respuestas ante casos particulares.

El domingo 14 de octubre, nuevamente en San Pío, los jóvenes se reunieron y analizaron el panorama frente a lo que pasará con la financiación de sus carreras. Además, se organizaron para acompañar la marcha de las antorchas.

Julián Cañas, estudiante de psicología en la Unab y miembro del Colectivo de Estudiantes de Universidades Privadas, contó que antes de que el gobierno tomara la decisión de suspender y transformar el programa, ya se tenían dificultades y la nueva decisión generó más incertidumbre.

“A veces los desembolsos del subsidio de sostenimiento llegaron a tardar hasta el final de semestre. Esto es especialmente complicado para aquellos que vinieron de zonas apartadas a la ciudad y tienen que pagar pensión, alimentos, transporte y gastos de la universidad”, dijo Cañas.

Santiago Triana Ardila, estudiante de ingeniería mecatrónica de la misma universidad, explica que cuando fue a renovar su crédito condonable para cursar octavo semestre, su solicitud fue rechazada y su caso, como el otros beneficiarios, entró en estudio.

“Hubo demoras para que nos aprobaran y pudiéramos iniciar clases este semestre. Estaban rechazando las solicitudes porque muchos venían atrasados. Firmamos el compromiso de no perder ni una materia y nos dijo que esperáramos el resultado de la revisión. Finalmente, me renovaron el crédito, pero esto no deja de preocuparnos”, comentó Trianan.

Germán Vargas, miembro del Colectivo de Estudiantes de Universidades Privadas y beneficiario del programa ‘Ser Pilo Paga’, expuso que, lamentablemente, no en todos los casos las universidades logran acuerdos con los beneficiarios. “Por motivos personales, problemas familiares o de estudio, varios compañeros no pudieron seguir y el Icetex no les renovó el crédito y tampoco los escuchó. Al final ellos terminaron con un crédito normal en esa institución”, comentó Vargas.

Andrés Rodríguez, quien cursa cuarto semestre de ingeniería mecatrónica en la Universidad Santo Tomás de Bucaramanga, comenta que la socialización sobre cambios en el programa, especialmente a los estudiantes de la versión 3, ha sido poca. “No nos han dicho algo antes ni socializaron algo después sobre los nuevos requisitos (Ver recuadro). Si son ciertos, me parece muy mal porque llevar una carrera en línea no es cosa fácil y la beca se vuelve insostenible”.

El 27 de septiembre, la Unión Nacional de Estudiantes de la Educación Superior (Unees) emitió en el Pliego Nacional de Exigencias en el cual se pidió “la reliquidación de las deudas de los estudiantes con el Icetex con tasa real de interés en 0%”.

William López, estudiante de derecho de la Unab, explica que este punto es importante debido a que contrarresta el cobro de intereses sobre intereses, pues el “Icetex es un banco, hace negocio con la incapacidad de pago de las personas, así se va formando una deuda que va creciendo cada vez más rápido y luego es imposible.

Algunas exigencias de las universidades

En la Unab:

-Al iniciar sus estudios y durante todo el proceso el ‘Pilo’ debe mantener un promedio acumulado, igual o superior, al exigido por la Institución de Educación Superior (IES), respetando la autonomía universitaria. Desde la tercera convocatoria de SPP se implementó en el reglamento operativo que, en caso que la IES no tenga un promedio establecido, los beneficiarios no puede tener un promedio inferior a 3.0 durante dos periodos consecutivos.
-Ante casos especiales de estudiantes que se desnivelan considerablemente en su programa de formación, la Unab ha evaluado sus situaciones con el objetivo de poder brindarles una ayuda oportuna y que no pierda sus beneficios.
-Ha sucedido que con los ‘Pilos’ de la versión 1 y 2, a quienes en su Reglamento Operativo no tienen restricción de promedio ni de nivel, y justamente presentan desnivel en periodos académicos por la pérdida de varias materias, se les ha exigido: no perder ni cancelar materias, y contar con el acompañamiento total con Bienestar Universitario y la coordinación del programa académico al cual pertenece.

En la Universidad Santo Tomás de Bucaramanga:

-De acuerdo con la oficina del Icetex de la Usta, los nuevos requisitos para renovar crédito en el próximo semestre son: cumplir con un promedio igual o superior a 3.4, no perder ninguna materia asignada y estar nivelado en los semestres.

Por Johan Alexander Sanabria

jsanabria73@unab.edu.co

Universidad Autónoma de Bucaramanga