Con la campaña "Yo sí voy al psiquiatra" se busca disminuir el estigma a la búsqueda de ayuda y atención y así prevenir el suicidio. /FOTO PAULA REYES

Por Paula Juliana Reyes Torres / preyes302@unab.edu.co

En Colombia, en el año 2018 se registraron 2.696 casos de suicidio y Santander ocupa el quinto puesto con mayor número de suicidios anuales en el país. Alrededor de este tema existen una serie de tabúes que aportan al desconocimiento y por lo tanto a que la tasa de suicidio aumente. Es por esto que se crea la campaña “Yo sí voy al psiquiatra”, para educar a la población y reducir el estigma que existe frente al tema, frente a la búsqueda de ayuda necesaria, y de esta manera se pueda prevenir el suicidio, no solo desde lo médico, sino también desde la cotidianidad.

“Necesitamos hablar del tema, necesitamos mostrarle a la gente que prevenir es preguntar, que hay preguntas que salvan vidas” afirma la doctora Carolina Porras Chaparro, psiquiatra de niños y adolescentes, pues considera que es tiempo de que se reconozca el papel del diálogo y de la atención necesaria que se debe prestar a las personas que tienen indicios de un pensamiento relacionado o con tendencia suicida, pues la tasa en Colombia en 2018 subió a un 10.53% y por supuesto la población más afectada son los jóvenes y niños entre 5 y 17 años.

Así mismo, la doctora Vanessa Castro Rueda, psiquiatra y docente de la Unab, destaca que existen ciertos prejuicios que le restan la importancia y reprimen muchas veces la confianza que una persona en esta condición puede tener. Estos prejuicios se ven reflejados en los mitos, frases y justificaciones como “Es por llamar la atención”, “El que quiere no lo dice, lo hace”, “Eso es de cobardes/valientes”, entre otros. El problema radica en que la desinformación y el juzgamiento que se hace hacia las personas perjudica el proceso de confianza y no permite una correcta mediación en la prevención del suicidio. 

Por otro lado, un punto a trabajar en este tema también fue el impacto de los medios y el adecuado tratamiento que se debe dar en la información que se transmite. La Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó un instrumento escrito dirigido especialmente a los comunicadores con recomendaciones para que el tema del suicidio, más que un hecho amarillista, funcione como un método de concientización y permee de manera positiva en la audiencia. “La forma en que los medios informan acerca de los casos de suicidio puede influir en otros suicidios” afirma el doctor German Eduardo Rueda, médico psiquiatra de la Unab, justificandolo en el efecto Werther, un término referente a un fenómeno social que presume la imitación o la tendencia al suicidio por la popularidad de la obra “Las penas del joven Werther”, en donde el protagonista de esta novela sufre por amor hasta quitarse la vida.

Como indicaciones a seguir establecidas en el documento, los expertos en el tema expresan que al informar este tipo de noticias es necesario ser cuidadoso con las cifras y con las fuentes, es decir, que estas sean confiables y auténticas. También, se debe tener en cuenta que un aspecto perjudicial para tratar estos temas es usar contenido audiovisual detallado, explicar los métodos usados, o justificar el acto con aspectos superficiales (monetarios, de amor, laborales, entre otros) pues estos no son más que detonantes, la psicología del suicidio es algo mucho más profundo.

 Las principales señales de alarma que se plantean son los cambios habituales en el comportamiento, cambios de estad, expresar pensamientos de muerte y suicidio, despedirse y/o regalar pertenencias y comportarse de una forma autodestructiva. Ante esto, los expositores afirmaron que desde la cotidianidad, sin necesidad de tener estudios en Psicología o Psiquiatría, se pueden empezar a detectar estas señales de alarma y lo que es importante que las personas estén capacitadas para este ejercicio. Los doctores reconocen que esta estrategia puede funcionar si se empiezan a gestionar espacios para la sensibilización, pues en vista de que las tasas siguen aumentando, sería importante actuar desde el entorno conjuntamente.

Universidad Autónoma de Bucaramanga